En el libro de Umberto Eco, Los límites de la interpretación*, en su Aspectos de la semiosis hermética (pàg.61) un cuadro histórico de los modelos de interpretación: Sintetizo lo expuesto por el autor.
1. El modus
La filosofía griega, especialmente, desde Platón a Aristóteles, y por extensión buena parte de la filosofía helenística, conocer supone conocer la causa. Esta forma de entender y explicar el mundo, supone unos principios que fueron esbozados por Parménides. La cadena de causa implica la existencia de tres principios que son característicos del modelo de pensamiento de Occidente. Estos principios son el principio de identidad (A=A), el principio de no contradicción (es imposible que algo sea A y no sea A al mismo tiempo) y el principio del tercero excluido (o A es verdadero o A es falso y tertium non datur -una tercera no se da-). De estos principios aparecerá el modelo de pensamiento propio del racionalismo occidental, el modus ponens. Si p, entonces q; pero P, entonces q [Si Juan es alto, entonces María es baja, pero Juan es alto, entonces María es baja. La lógica se desentiende si materialmente la proposición tiene sentido o sinsentido]
Estos principios suponen la necesidad de poner orden el mundo de la physis. Al decir de Eco, el racionalismo latino va más allá "enriqueciéndolo en sentido jurídico y contractual". El modelo de pensamiento es el modus ponens, y eso significa limitación a lo que podemos conocer. Ese límite supone poner coto al hybris -desmesurada-, pues, "si no se reconoce un límite no puede haber civitas". Existe civitas -espacio habitado por humanos regidos por leyes- porqué se ha puesto límite al deseo desmesurado de los seres humanos. Lo propio de los tiranos es precisamente su afán desmesurado de imponer su voluntad y no la ley.
En el orden temporal, también existe límites. El tiempo pasado no se puede borrar. El tiempo es irreversible. El orden natural regido por leyes se expresa en el orden social. Una simetría entre ambos ordenes gobierna el mundo. Este modelo incluso penetrará en la esfera del pensamiento cristiano. Incluso Dios, no puede saltarse el esquema del modus. Ese racionalismo lo expresará Tomás de Aquino. Existirán corrientes de pensamiento cristiano, que impugnarán este modelo, pues, de alguna manera, limitan el poder de Dios (omnipotencia).
Este racionalismo triunfante que llega hasta hoy mismo, la IA sería la expresión culminante de este modelo. Sin embargo, existían otras corrientes ya en el seno del pensamiento griego que impugnaban dicho modelo. Los misterios eleusinos serían un ejemplo. Uno de los caracteres de la filosofía griega era su esfuerzo por pensar el límite, pero también existía una atracción por el apeiron -Anaximandro, s.VI-V a.C.(el infinito, lo que no tiene limites). El apeiron es lo que no se atiene al modus.
El pensamiento griego. "junto al concepto de identidad y no contradicción, creará la idea de metamorfosis continua simbolizada por Hermes". La idea de metamorfosis pone en cuestión los principios fundamentales del pensamiento triunfante desde Platón. Hermes "no conoce fronteras espaciales y puede estar, bajo formas diferentes, en lugares diferentes en el mismo momento". Hermes trastoca completamente el modelo del pensar “lógico”.